lunes, 9 de abril de 2012

Cómo reaccionar cuando un cliente te dice que “no”


Cuando un cliente rechaza tu propuesta te sientes un poco como antes cuando intentabas ligar con una chica pero ella no te quería (me imagino que las chicas deben haber sentido lo mismo). En el primer momento sientes incluso cabreo porque no puedes entender que alguien se esté negando a tu oferta visto que encaja “perfectamente” con sus necesidades. No te desesperes con estos momentos porque si haces las cosas bien, probablemente te va a ocurrir constantemente.



¿Por qué es bueno que un cliente te diga que “no”?
En muchos casos decirle “no” a un cliente te puede ayudar a evitar mayores daños. Cuando tengas la situación al revés sácale el mayor provecho.
  • Te permite mejorar tu discurso comercial.
  • Identificas y descartas tu tipo de cliente ideal.
  • Puede protegerte a “cagarla” cuando no estás lo suficientemente preparado.
  • Identificas debilidades de tu producto en comparación con la oferta de la competencia.
Analizar las razones detrás del “no”
Pueden existir una serie de razones para el rechazo de una oferta por parte de un cliente potencial. La mayoría de ellas no tienen nada que ver con el producto o servicio que propones.
1. Competencia: no has podido competir con otras ofertas.
2. Presentación: no has explicado bien el valor añadido de tu empresa.
3. Timing: no era el buen momento para ver al cliente y proponerle algo.
4. Detalles: no has cuidado la forma como p.ej. la redacción correcta de un e-mail.
5. Simpatía: no has podido “conectar” con el cliente.
6. Contacto: no has dado con la persona adecuada para una decisión a tu favor.
7. Necesidad: tu cliente no tiene necesidad de hacer uso de tu oferta.
Cómo tratar el “no” de un cliente
No me gusta rendirme tras un “no”. Incluso puede llegar a motivarme. El único caso que no merece buscar una segunda oportunidad es el último. Da igual como lo pintes, ofreces algo que tu cliente no necesita. En todos los demás casos, vale la pena seguir luchando.
  • Pide feedback para identificar las razones exactas detrás del “no” y aprende de ello.
  • Despídete con un mail dando las gracias por haberte atendido.
  • Intenta mantener el contacto a través de Twitter o LinkedIn.
  • Deja pasar mínimo 3 meses antes de buscar una segunda oportunidad.
  • Vuelve con una nueva oferta o mejor manera de presentarla.
Un “no” se puede convertir en un “si”. No te agobies cuando te rechace un cliente. Es algo que te debe ocurrir a menudo cuando haces los primeros pasos con tu start-up. Aprovéchalo para mejorar tu oferta y la manera de vender tus productos y servicios.
¿Qué haces tú cuando un cliente te dice que “no”?
Fuente: http://www.marketingguerrilla.es