domingo, 12 de febrero de 2012

Los autónomos contratarán a cerca de 400.000 parados

El Gobierno ha apostado en su reforma laboral –que aprobó el pasado viernes– por los autonómos y las pymes con menos de 50 trabajadores, que representan el 99,2% del tejido industrial de nuestro país. A este amplio colectivo, dirige un abanico de ayudas fiscales y bonificaciones en las cotizaciones a la Seguridad Social para hacer lo suficientemente atractiva la contratación de trabajadores indefinidos. Por eso los autónomos han aplaudido estos cambios legislativos, tal y como reconoce el presidente de ATA, Lorenzo Amor. Esta organización considera que estas medidas contribuirán, sin ningún género de dudas, a crear puestos de trabajo este mismo año.
Según sus cálculos, los autónomos darán empleo, al calor de las nuevas deducciones fiscales y bonificaciones, a entre 300.000 y 400.000 personas desde ahora hasta finales de verano. De estas contrataciones, el 60% irán dirigidas a jóvenes menores de 30 años, colectivo con mayores ayudas si se rescata del paro. En estos momentos, existen tres millones entre pymes y autónomos en España. De esta cuantía, 1,950 millones son autónomos, de los que 1,6 millones no tienen ningún empleado a su cargo. Circunstancia que, según las estimaciones de Lorenzo de Amor, comenzará a cambiar a partir de ahora.

El decreto ley, publicado este sábado en el Boletín Oficial del Estado, recoge en su artículo cuarto un contrato indefinido, diferente al ordinario, de uso exclusivo para las pymes de menos de 50 trabajadores. Esta modalidad contractual será a jornada completa, tendrá un período de prueba de un año y disfrutará de unos incentivos a Hacienda y a la Seguridad Social que, según los casos, pueden ascender a 9.000 euros. Los 1,6 millones de autónomos que no tienen trabajador a su cargo, si emplean a un joven menor de 30 años disfrutarán de una deducción fiscal de 3.000 euros. A esa cuantía, podrán sumar una deducción del 50% de la prestación por desempleo del parado que rescate de las listas del INEM. Eso sí, el trabajador deberá haber percibido la prestación durante, al menos, tres meses en el momento de la contratación. La persona contratada por el autónomo o la pyme deberán facilitar un certificado del Servicio Público de Empleo estatal sobre el importe de la prestación pendiente de percibir en la fecha prevista de inicio de la relación laboral. El trabajador rescatado del paro puede optar voluntariamente por compatibilizar su salario con el 25% de la prestación por desempleo. Además de estos incentivos fiscales, la contratación de parados dará derecho a bonificaciones en las cuotas a la Seguridad Social. Si el empleado es menor de 30 años, reducirá sus cuotas en 3.300 euros en tres años. Si es mayor de 45 años, las bonificaciones ascenderán en tres años a 3.900 euros. Si el contrato lo suscribe una mujer en un sector donde este colectivo está menos representado, la bonificación se elevará a 1.500 euros al año. Estas bonificaciones serán compatibles con otras ayudas públicas previstas con la misma finalidad. Para percibir los incentivos, el empresario deberá mantener al trabajador contratado al menos tres años desde la fecha del inicio de la relación laboral. En el supuesto de que lo despida antes, deberá reintegrar las bonificaciones y deducciones percibidas.
Fuente: http://www.larazon.es